¿Qué te aporta el shampoo y acondicionador herbal?
Limpia profundamente desde el folículo sin resecarlo, fortaleciendo desde la raíz sellando las puntas. Sus aceites vegetales, nutren, renuevan y regeneran las fibras capilares, aportando fuerza, grosor y suavidad, controlando el “frizz”.
• Aceite esencial de jojoba: Este aceite ayuda a limpiar el folículo piloso desde la raíz, regulando la secreción de grasa y cebo del cuero cabelludo, sella las puntas y combate la caspa. También es un excelente acondicionador capilar.
• Proteína de trigo hidrolizada: Esta proteína es rica en aminoácidos. Forma una capa protectora que da brillo y sedosidad. Ayuda a engrosar el tallo del cabello, aporta volumen y controla el “frizz”.
• Pantenol: La pro-vitamina B5, ayuda al crecimiento del cabello, lo nutre desde la raíz permaneciendo en él, tras aplicarlo y enjuagarlo, ayudando a retener la humedad.
• Aceite de coco: Es rico en proteínas, vitamina E, vitamina K, magnesio, hierro y potasio, gracias a ello nutre y revitaliza el cuero cabelludo, aporta brillo y suavidad, sin dejar el cabello graso.
• Aceite esencial de romero: Favorece la circulación sanguínea del cuero cabelludo, oxigenando los folículos pilosos y reactivando el crecimiento capilar. Brinda suavidad, fuerza y grosor.
• Arcilla blanca: Aporta vitaminas y minerales como selenio, potasio, calcio, zinc y hierro, nutre, renueva y regenera las fibras capilares que llegan al folículo piloso.
• Aceite esencial de manzanilla: Hidrata, humecta, da brillo y suavidad, haciendo el cabello más dócil. Protege el cabello de factores externos que pueden dañarlo (contaminación, polvo, sol).
• Aceite esencial de lavanda; Favorece el crecimiento del cabello, ayuda a prevenir la caída. Además, su aroma ofrece una sensación super relajante y agradable.